Ansiedad Generalizada
BUENAS TARDES ESTIMADOS ESTUDIOSOS DE LAS CIENCIAS FORENSES
La ansiedad es una respuesta de anticipación involuntaria del organismo frente a estímulos que pueden ser externos o internos, tales como pensamientos, ideas, imágenes, etc., que son percibidos por el individuo como amenazantes y peligrosos y se acompaña de un sentimiento desagradable o de síntomas somáticos de tensión.
Se trata de una señal de alerta que advierte sobre un peligro inminente y permite a la persona que adopte las medidas necesarias para enfrentarse a una amenaza.
El trastorno de ansiedad generalizada se desarrolla lentamente, y suele comenzar durante la adolescencia o juventud. Los síntomas pueden mejorar o empeorar en distintos momentos, y con frecuencia empeoran durante momentos de estrés.
A veces el trastorno de ansiedad generalizada es hereditario, pero nadie sabe con seguridad por qué algunas personas lo tienen y otras no. Los investigadores han descubierto que hay varias partes del cerebro relacionadas con el miedo y la ansiedad. Los estudios sugieren que las preocupaciones extremas que acompañan a este trastorno tratan de evitar o ignorar alguna otra preocupación más profunda. Si la persona soluciona ese problema, entonces las preocupaciones del trastorno de ansiedad generalizada también desaparecerían. Además, los investigadores están tratando de averiguar cómo el estrés y los factores ambientales influyen en el desarrollo de este trastorno.
El síntoma principal es la presencia frecuente de preocupación o tensión durante al menos 6 meses, incluso cuando hay poca o ninguna causa clara. Las preocupaciones parecen flotar de un problema a otro. Los problemas pueden involucrar la familia, las relaciones interpersonales, el trabajo, el dinero y la salud.
Las personas con el trastorno de ansiedad generalizada pueden:
Preocuparse demasiado por las actividades diarias.
Tener problemas para controlar sus preocupaciones constantes.
Ser conscientes de que se preocupan mucho más de lo que deberían.
Tener dificultad para relajarse.
Tener problemas para concentrarse.
Ser fácilmente sorprendidas.
Tener problemas para dormir o permanecer dormidos.
Sentirse cansados todo el tiempo.
Tener dolores de cabeza, de los músculos, del estómago o dolores inexplicables.
Tener dificultad para tragar.
Tener temblores o tics (movimientos nerviosos).
Sentirse irritables, sudar mucho, y marearse o sentir que les falta el aire.
Necesitar ir al baño seguido.
Otros síntomas del TAG incluyen:
- Problemas para concentrarse - Fatiga - Irritabilidad - Inquietud al despertarse
Como tratar la ansiedad generalizada:
Psicoterapia. Un tipo de psicoterapia llamada terapia cognitiva-conductual es especialmente útil para el tratamiento del trastorno de ansiedad generalizada. Le enseña a la persona diferentes formas de pensar, de comportarse y cómo reaccionar ante distintas situaciones para ayudarle a sentir menos ansiedad o preocupación.
Medicamentos. Los médicos también pueden recetar medicamentos que ayudan a tratar el trastorno de ansiedad generalizada. Hay dos clases de medicamentos que se recetan con más frecuencia para tratar este trastorno: Los ansiolíticos y los antidepresivos. Los ansiolíticos son medicamentos fuertes y existen diferentes tipos, muchos de los cuales comienzan a trabajar de inmediato. Sin embargo, por lo general, no se deben tomar por períodos largos de tiempo.
Fuente: Institutos Nacionales de la Salud.